Ceguera y deficiencia visual

Ceguera y deficiencia visual

No es lo mismo ceguera que deficiencia visual o discapacidad visual. Existen diferentes grados de visión para todas las personas, marcados por patologías ópticas y otros posibles problemas de vista derivados de otras anomalías, como cerebrales o musculares.

Qué es la ceguera o pérdida o falta de la visión

Cuando hablamos en general de ceguera, discapacidad visual grave o deficiencia visual, nos estamos refiriendo a condiciones caracterizadas por una limitación total o muy seria de la función visual.

Tipos de ceguera

Ceguera total

 Las personas ciegas o con ceguera son aquellas que no ven nada en absoluto o solamente tienen una ligera percepción de luz (pueden ser capaces de distinguir entre luz y oscuridad, pero no la forma de los objetos).

Ceguera parcial

Por otra parte, son personas con deficiencia visual aquellas que con la mejor corrección posible podrían ver o distinguir, aunque con gran dificultad, algunos objetos a una distancia muy corta. En la mejor de las condiciones, algunas de ellas pueden leer la letra impresa cuando ésta es de suficiente tamaño y claridad, pero, generalmente, de forma más lenta, con un considerable esfuerzo y utilizando ayudas especiales.

Causas más frecuentes de la ceguera

Diabetes

La diabetes es una enfermedad crónica producida cuando el cuerpo no puede regular la cantidad de azúcar en la sangre. Puede estar causada por muy poca producción de insulina, resistencia a la insulina o por ambas.

Cuando no hay suficiente insulina queda demasiado azúcar en el torrente sanguíneo y con el tiempo esto puede provocar problemas de salud graves, entre ellos oculares, como dificultad para ver, especialmente por la noche, sensibilidad a la luz y ceguera.

Tipos de diabetes

La diabetes tipo 1, menos común. Se puede presentar a cualquier edad, pero se diagnostica con mayor frecuencia en niños, adolescentes o adultos jóvenes. En esta enfermedad, el cuerpo no produce o produce poca insulina debido a que las células del páncreas encargadas de ello dejan de trabajar.

La diabetes tipo 2, más común: Suele presentarse en la edad adulta. Pero debido a las tasas altas de obesidad, ahora también se está diagnosticando a niños y adolescentes. Con la diabetes tipo 2, el cuerpo es resistente a la insulina y no la utiliza con la eficacia que debería.

Todas las personas con diabetes, tanto del tipo 1 como del tipo 2, corren riesgo de desarrollar retinopatía diabética, una de las principales causas de ceguera. Ocurre cuando la diabetes daña a los pequeños vasos sanguíneos de la retina, causando pérdida de visión de dos maneras:

Se pueden desarrollar vasos sanguíneos anormales y frágiles que pueden gotear sangre en el centro del ojo, opacando la visión. Esto es la retinopatía proliferativa,

Puede gotear líquido dentro del centro de la mácula, la parte del ojo que provee la visión central clara, y hacer que la mácula se inflame, nublando la visión. Esta condición se llama edema macular.

La retinopatía diabética frecuentemente no ofrece ninguna señal de advertencia temprana, por lo que es muy importante la prevención, realizando un examen oftalmológico completo de la vista con dilatación de las pupilas, por lo menos una vez al año.

Glaucoma

El glaucoma es un grupo de afecciones oculares causadas por la muerte precoz de las células ganglionares de la retina (axones del nervio óptico).

El factor de riesgo más común es la hipertensión ocular, una presión extrema del nervio óptico causada por la acumulación de humor acuoso, un líquido incoloro que se encuentra entre la cámara anterior y posterior del ojo.  Además de la hipertensión ocular, la predisposición genética, la miopía, la diabetes y los problemas vasculares también son factores de riesgo importantes.

En consecuencia, si el glaucoma no se detecta y trata a tiempo, el campo visual de la persona afectada va disminuyendo progresivamente hasta llegar a la pérdida total de visión. De hecho, el glaucoma es una de las principales causas de ceguera para las personas mayores de 60 años.

Tipos de glaucoma:

Hay bastantes tipos de glaucoma, pero los dos más habituales son el glaucoma de ángulo abierto y el glaucoma de ángulo cerrado.

Glaucoma de ángulo abierto: El glaucoma de ángulo abierto representa el 90% de todos los casos detectados y es provocado por la obstrucción lenta de los canales que se encargan de drenar el humor acuoso. Esto conlleva un aumento lento de la presión ocular y el daño irreversible del nervio óptico.   

Glaucoma de ángulo cerrado: El glaucoma de ángulo cerrado surge cuando hay un bloqueo total de los canales de drenaje del humor acuoso, lo que provoca que este se acumule y aumente la presión ocular. A diferencia del glaucoma de ángulo abierto, este se desarrolla muy rápidamente.

Degeneración macular 

La degeneración macular o DME es una afección ocular que provoca una lenta y progresiva pérdida de visión central y aguda.  La retina, donde se encuentra la mácula, es la encargada de transmitir señales nerviosas al cerebro para que este sea capaz de visionar la luz e imágenes. En todo este proceso nervioso, la mácula proporciona nitidez y definición a aquello que estamos viendo, pero una mácula dañada hará que nuestra visión sea débil, poco detallada y borrosa.

Tipos de degeneración macular:

1- Degeneración macular seca: La degeneración macular seca se produce cuando las células y vasos sanguíneos de la mácula se deterioran y se vuelven cada vez más finas, haciendo que se forman pequeños depósitos amarillos (drusas) y que la visión central se nuble gradualmente.

La degeneración macular seca tiene 3 etapas:

Degeneración macular temprana: durante la etapa temprana, el ojo afectado empieza a tener pequeñas drusas localizadas, pero no hay pérdida de visión grave.

Degeneración macular intermedia: Durante la degeneración macular intermedia, las drusas se hacen cada vez más grandes y las personas afectadas ven un punto borroso en el centro de su visión. Es posible que durante esta etapa se necesite más luz para leer, escribir y hacer todo tipo de tareas.

Degeneración macular avanzada: Además de las drusas, las personas con degeneración macular seca avanzada tienen un deterioro de las células sensibles a la luz que causa un punto borroso en el centro de su visión. Con el tiempo, este punto borroso se puede ir agrandando y oscureciendo hasta llegar a la pérdida total de visión.

2- Degeneración macular húmeda: La degeneración macular húmeda ocurre cuando los vasos sanguíneos que hay detrás de la retina empiezan a crecer demasiada cerca de la mácula. Igual que en la degeneración macular seca, estos vasos suelen ser muy frágiles y muchas veces desprenden sangre y líquidos que hacen que la mácula se desplace de su lugar habitual en el fondo del ojo. La degeneración macular húmeda es más severa que la seca y conlleva una rápida pérdida de visión

El principal factor de riesgo de la degeneración macular es la edad, pero factores como el consumo de tabaco o la obesidad también incrementan su riesgo. Además, las mujeres se ven más afectadas por esta patología que los hombres.